(Fuente: La Gaceta Rural) Se trata de la principal preocupación que tienen los citricultores, como reconoció Roberto Sánchez Loria. El rol privado y los ciudadanos
¿Es posible blindar al Noroeste Argentino para evitar la entrada de la temible enfermedad Huanglongbing (HLB)? ¿Se necesitan más recursos, más personal técnico, más leyes, más normativas? ¿Tucumán puede lograr un bloqueo total? Sobre todos estos temas transitó el diálogo, café de por medio, que LA GACETA Rural mantuvo con Roberto Sánchez Loria, presidente de la Asociación Tucumana del Citrus (ATC).
– ¿Se puede blindar al NOA de la entrada del HLB? – Sí se puede, pero mejorando la prevención contra el HLB.
Hoy existen, además, herramientas jurídicas para lograrlo, porque existe la Ley Nacional de Prevención del HLB.
Además, por iniciativa del Ministerio de Desarrollo Productivo de Tucumán, se logró la firma del Acta Compromiso, entre los cuatro gobernadores del NOA, referida a aunar esfuerzos en cuanto a las acciones que tiendan a la prevención de la llegada del HLB.
Lógicamente, se necesita una participación activa del sector privado, en lo que tiene que ver con la producción, como así también el ciudadano común. ¿Por qué? Porque el HLB es una enfermedad que puede ser transmitida por plantas ornamentales (Mirto), que pueden ser traídas por familias, amas de casa, etcétera. Entonces, el ciudadano común debe estar informado sobre los cuidados a tener en cuenta, ya que puede ocasionar daños a la economía provincial y, así, evitar el traslado de estas plantas que son muy dañinas. Esto implica tener una actitud responsable y comprometida del ciudadano común con la economía provincial.
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¿Cómo deben actuar los integrantes del sector privado?
– Los productores deben ser los líderes en las medidas de prevención que se difunden a través de las instituciones estatales que trabajan en el tema del HLB, como el Senasa, la Eeaoc, el INTA, Afinoa, el Ministerio de Agricultura de la Nación, entre otros.
Algunas de esas medidas, muy importantes, están referidas a comprar plantas cítricas en viveros certificados, con lo cual aseguran la procedencia del material genético a los campos citrícolas.
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¿Y los controles de las fronteras nacionales y provinciales?
– El control de fronteras, de las barreras de acceso a las distintas provincias, el control del material que se traslada de una provincia a otra, de un país a otro, es sumamente importante, y están en la órbita del Gobierno Nacional y de los Gobiernos provinciales, que hoy cuentan con estas herramientas legales (la Ley Nacional y el Acta Acuerdo), para facilitar este tipo de acción, tendiente a evitar que tan temible enfermedad desembarque en el NOA.
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¿Qué hay que hacer en las fronteras internacionales?
– Todas las fronteras deben mejorar, tanto las nacionales como las interprovinciales. Deben ser más efectivas, más intensas, ya que deben mejorar sustancialmente para elevar los niveles de preservación.
Esto nos preocupa mucho, porque conocemos sobre la enfermedad de la planta, una enfermedad que termina matando a la planta.
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Las acciones de prevención deben ser conjuntas, únicas.
– La prevención contra el HLB está asociada a las acciones conjuntas entre el sistema gubernamental y la actividad privada; acciones que deben ser intensas, de calidad y sostenidas en el tiempo.
Las normas son el marco jurídico necesario para la acción. Los resultados serán en función de esas acciones conjuntas. Ahora, llegó el tiempo en que debemos actuar.