Son 160.000 toneladas, de las cuales 100.000 toneladas “son de origen desconocido”. Los excedentes afectan el precio, al punto de que el sector perdió de ganar $ 880 millones, según el industrial Julio Colombres. “Con un azúcar que vale $ 40 menos por bolsa de 50 kilos que lo que se podría obtener, el sector azucarero se pierde de ganar $ 880 millones. Por eso, es vital el saber quién hace azúcar y no la declara”, señaló a LA GACETA el presidente del Centro Azucarero Regional de Tucumán (CART), Julio Colombres.
El industrial analizó la marcha de la zafra 2012, en función de las previsiones productivas que dio a conocer la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC)). A través de un estudio satelital y de campo, la entidad determinó que los ingenios de Tucumán están en condiciones de elaborar este año hasta 1,29 millón de toneladas de azúcar si no se registran heladas o si el fenómeno es leve, y si son buenas las condiciones de la zafra en marcha. En caso de que la caña lograra una maduración intermedia, heladas moderadas o inconvenientes en el desarrollo de la zafra, como abundancia de lluvias, la producción sería de 1,18 millón de toneladas de azúcar, y de 1,09 millón si se presentan malas condiciones para maduración, heladas severas y problemas en el desarrollo de la molienda. Los ingenios de Jujuy y Salta aportarían otras 800.000 toneladas, según estimaciones de la industria. (Fuente: La Gaceta)Necesidad de exportar
“Entiendo que son razonables los resultados del informe de la Estación Experimental, pero aún si se da la opción de mínima y al margen de cualquier situación que se presente, urge sacar del mercado interno 160.000 toneladas de azúcar”, recalcó Colombres. Dijo que este volumen surge de 60.000 toneladas que importó el año pasado el ingenio Ledesma, más otras 100.000 toneladas cuyo origen se desconoce. Según las entidades cañeras, este valor se desprende de azúcar comprometida a ser exportada por ingenios de todo el país, y que finalmente fue volcada al mercado interno, y de caña que se debía destinar a la producción de bioetanol, que finalmente se destinó a azúcar.
Según Colombres, más allá de las críticas, desde 2008 el sector azucarero acordó y cumplió con las exportaciones. “El problema del último año tiene que ver no con la no exportación de las 60.000 toneladas que se importaron, sino con la extemporaneidad de la autorización del Gobierno para exportar. Pero el gran tema es que hay 100.000 toneladas de origen no esclarecido que son el centro del problema”, resaltó. “Si hacemos los deberes para exportar, debemos saber de dónde provienen estos excedentes”, concluyó el presidente del CART.