(Fuente: La Gaceta Rural) Recomiendan diseñar un programa. Por día, hay que cosechar sólo lo acordado
La planificación y coordinación de las tareas de cosecha y transporte implica el establecimiento de un programa de cosecha y transporte, un cronograma de tareas y la previsión de los diferentes recursos necesarios para cumplir dicho programa (recursos físicos, mecánicos, de personal, etc.), ya sea que se vaya a realizar una cosecha integral o semimecánica, explicaron los técnicos de la EEAOC (Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres) de Tucumán. Las previsiones de trabajo también comprende la realización del control de la calidad de las operaciones de cosecha y el mantenimiento de los equipos de cosecha y transporte de la caña de azúcar.
Para cosechar en forma eficiente con las cosechadoras integrales, y preservar la “cepa” para el crecimiento de la campaña siguiente, es recomendable una velocidad de avance de la máquina de entre 4 kilómetros por hora (km/h) y 6 km/h, empleando la menor velocidad en aquellos cañaverales de mayor nivel productivo y/o caídos.
De esta forma, se reducen las pérdidas de materia prima y se realiza una cosecha que no resulta tan agresiva para el cañaveral, evitando un daño excesivo a la “cepa”.
Mantenimiento
El buen estado de las “cuchillas de corte” es fundamental, ya que si se encuentran gastadas desgarran la caña, en vez de realizar un corte neto y, en esa condición, se agudizan los problemas de deterioro de la calidad de la materia prima.
Además, la regulación correcta de la altura de corte basal evitará que se dejen en el campo “tocones”, lo que significa la pérdida de entrenudos con calidad fabril.
Dónde cortar
Por otro lado, la “altura de despuntado” es clave para evitar mandar a la fábrica (los ingenios) materia prima inmadura (pobre en azúcar y con abundancia de sustancias que afectan negativamente el desarrollo del procesamiento fabril). En relación a este aspecto, no se debería enviar a la industria entrenudos con menos de 13% Brix, y éste debe ser el criterio para fijar la altura de despuntado. La velocidad del extractor primario debe mantenerse entre 900 y 1.000 revoluciones por minuto (rpm), para lograr una buena limpieza de la caña sin ocasionar grandes pérdidas de materia prima.
Semimecánica
Para el caso de la cosecha semimecánica, es recomendable “cosechar cada día la cantidad acordada con el ingenio” (asignación diaria), evitar la quema de la caña en pie, controlar cuidadosamente la quema en el apilado y no quemar más que lo que se enviará al ingenio en el día.
En todos los casos, es clave “reducir al máximo el estacionamiento de la caña cosechada” y recordar que frente a la ocurrencia de heladas se hace indispensable evaluar el grado de daño sufrido por el cañaveral y reorganizar la cosecha de forma de cosechar rápidamente los lotes más afectados.