(Fuente: La Gaceta) Afinoa organizó las charlas y muestreos a campo junto al INTA, Senasa y Eeaoc.
Afinoa, junto al Senasa, la Eeaoc (Estación Experimental Agroindustria Obispo Colombres) y el INTA Yuto (Jujuy), impulsó una serie de capacitaciones para instruir a los responsables de esta tarea sobre cómo llevar a cabo la inspección visual y monitoreo de todas las quintas, en otoño-invierno, para la detección de síntomas sospechosos de HLB (Huanglongbing), y en primavera-verano para ver si se detecta la presencia de Diaphorina citri, el insecto vector. En este sentido, el NOA, por el momento, se encuentra en una situación privilegiada al no tener la enfermedad, y es por este motivo que se refuerzan todas las acciones para evitar su ingreso. Una de éstas son los monitoreos en las fincas.
Los técnicos de las diferentes instituciones involucradas delinearon el temario y planificaron las recorridas a las fincas, seleccionaron los lugares de manera estratégica para poder abarcar toda la zona citrícola del NOA, y se confeccionó una guía práctica con fotografías para los asistentes y que les sea útil como material de consulta. Y así se planificaron nueve capacitaciones que finalizaron con éxito. Asistieron unas 330 personas, entre productores, encargados de las tareas de monitoreo y estudiantes de las escuelas agrotécnicas.
Las capacitaciones se inician con una charla teórica brindada por técnicos de las áreas de Fitopatología y Zoología Agrícola de la Eeaoc, para las que tuvieron lugar en Tucumán, y por técnicos del INTA Yuto, para las realizadas en Salta y Jujuy; referidas a síntomas del HLB, confusión con otras enfermedades y deficiencias nutricionales, como así también, a las características de la Diaphorina citri. Luego, por grupos, los asistentes efectuaban una recorrida a campo para poner en práctica lo aprendido, para finalizar con una puesta en común de la experiencia.
“Estamos muy contentos por la convocatoria que tuvimos en todas las capacitaciones. Superamos los cupos que nos habíamos propuesto, eso fue muy bueno y gratificante, porque significa que el sector va tomando conciencia sobre la gravedad de esta enfermedad, y que si no actuamos a tiempo el resultado puede ser catastrófico para una región que tiene 50.000 puestos de trabajo directos generados por la citricultura. Los asistentes nos transmitieron su compromiso de aplicar los conocimientos transmitidos y empezar a entregar muestras de síntomas sospechosos a la Eeaoc e INTA Yuto para su análisis en laboratorio”, agregó. “Ha sido muy interesante para nosotros, es una buena enseñanza porque es una enfermedad muy peligrosa. Es importante que entendamos que el HLB nos perjudica a todos, porque si llega al NOA están en peligro nuestras fuentes de trabajo”, comentaron empleados de la empresa Citromax.
A su vez, el ingeniero agrónomo Fernando Carrizo, de la empresa Argenti Lemon, comentó: “nos llegamos para aprender a identificar el HLB. Es importante capacitarnos para mantener al NOA libre de la enfermedad por las fuentes de trabajo, y en esto la prevención es fundamental. Nos llevamos un buen aprendizaje”.
“Tenemos que tratar de concientizar a la gente, en general, porque es una enfermedad muy grave y puede quedar mucha gente sin trabajo”, expresaron empleados de la empresa Ledesma. “Básicamente, lo bueno de estas capacitaciones es que nos enseñan a tomar conciencia respecto que esta enfermedad no tiene cura para las plantas, y sin capacitarnos no vamos a saber cómo enfrentar al enemigo”, concluyeron.
“Estuvimos en Orán, Yuto, Palma Sola y Metán donde se hizo hincapié sobre la detección temprana de HLB. Tuvimos una muy buena recepción, una masiva asistencia. Tenemos que estar preparados, el HLB se nos viene y detectarlo precozmente es una herramienta muy importante; si no lo hacemos, el final será trágico”, comentó Ceferino Flores del INTA Yuto.
En total asistieron 238 personas a las capacitaciones que se realizaron en Tucumán, y 90 a las que tuvieron lugar en Salta y Jujuy.
“Si bien son muchos los que se comprometen en esta lucha, faltan muchos productores más. Si analizamos la procedencia, debemos considerar que el mayor número involucra a personal de las grandes citrícolas de la región, y en menor medida a productores de superficie chica o mediana. Necesitamos que, ante la problemática del HLB, todos los involucrados se sumen a este tipo de iniciativas. Cuantos más seamos los que nos capacitemos y hagamos la tarea de monitoreo, menor será la posibilidad de que el HLB llegue y se instale en el NOA”, expresó Galíndez. “Nos propusimos concientizar sobre la importancia de monitorear nuestras quintas cítricas y que esta acción se vuelva una práctica más dentro de todas las actividades agrícolas que se realizan en las fincas. Recomendamos al menos dos monitoreos, uno en otoño-invierno, para buscar síntomas sospechosos, y otro en primavera-verano, para buscar a la Diaphorina citri, el insecto vector. En este sentido es que vamos a realizar, en noviembre, otras capacitaciones enfocadas al insecto vector; queremos, con los técnicos de la Eeaoc, que los productores conozcan las características de la Diaphorina citri y cómo deben realizar el monitoreo para detectar su presencia en las plantas. Próximamente vamos a informar las fechas y lugares para que los interesados puedan inscribirse”, concluyó Galindez.
Ante cualquier duda o sospecha de síntomas sospechosos, los interesados comunicarse con la Eeaoc, INTA, Senasa o Afinoa, Dirección: Andrés Villa 120, Yerba Buena; Tel. 4356633; Cel. 11-3014-7696; afinoarodrigo73@yahoo.com.ar