El ingeniero agrónomo Sebastián Robles Terán asumió ayer como nuevo presidente de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT), en reemplazo de José Manuel Avellaneda. Robles Terán se desempeñó como vicepresidente de la entidad durante el mandato de Avellaneda, de manera que propone una continuidad de los tópicos que marcaron la gestión que acaba de concluir.
“El haber sido el vice de Avellaneda significó que esté empapado de la temática del campo y de la problemática del momento, lo cual facilitará un poco la continuidad de lo que se vino haciendo”, dijo a LA GACETA el flamante titular de la SRT, que asumió sus nuevas funciones anoche, en un acto realizado en la sede de la entidad ruralista. “En lo personal -abundó-, como productor y empresario, creo que se debe participar para poder impulsar los cambios que se consideran necesarios”.
Destacó que, como institución, “la SRT está sana, y es nuestro propósito el trabajar juntos con el Gobierno en lo que podamos, pero marcando las diferencias que nos separan en cuanto a las políticas hacia el campo”. En esta línea, ponderó la tarea conjunta llevada adelante con el Estado provincial para conseguir una rebaja en los fletes de larga distancia (Ver “Los fletes para granos…”) y la emergencia agropecuaria para las producciones afectadas por la última sequía. (Fuente: La Gaceta/Sección Economía)Comentó que en el sector de granos se registraron importantes pérdidas a causa de la falta de lluvias, lo que condicionará los resultados de la campaña en marcha. Planteó, además, un problema común a todos los productores agropecuarios, como es la suba sostenida de los costos, en particular los de mano de obra, servicios e impuestos, a lo que se suma el problema que genera un tipo de cambio prácticamente fijo. “En el caso de dos cultivos como el trigo y el maíz, además de estar afectados por las retenciones como otros granos, tienen el inconveniente de que los ROE (permisos de exportación) no se liberan con facilidad. La falta de transparencia en los mercados hace que estos cultivos sean prácticamente irrealizables”, expresó. Robles Terán también denunció el agobio que provoca en los productores la burocracia administrativa estatal y las normas que se dictan en forma permanente. “Para un agricultor, especialmente los de menor escala, cada vez resulta más complicado estar en regla”, apuntó. Defendió el rol de los “agrodiputados” que asumieron en el Congreso nacional en 2009, y dijo que sin ellos “tal vez las cosas habrían sido peor para nosotros”. Finalmente, ratificó la realización de las exposiciones tradicionales de la SRT, en especial la Expo Tucumán, prevista para septiembre.
Un dirigente que adhiere al diálogo
Robles Terán es un ingeniero agrónomo de 53 años, casado, y con 10 hijos. Es gerente de una empresa agropecuaria familiar y en los últimos años participó activamente en toda la actividad que desplegó la Sociedad Rural de Tucumán.