Se trata de exportaciones por entre 1.100 y 1.200 millones de dólares que deberán buscar otros mercados, por lo que en la Cámara Argentina de Biocombustibles ya analizan alternativas entre la Unión Europea y Asia.
La oficialización del arancel llegó casi dos meses después de que el Departamento de Comercio de Estados Unidos ratificara el arancel y la Argentina advirtió que denunciaría esta medida ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Con la confirmación en el Boletín Oficial de la gestión de Donald Trump, los aranceles para el combustible argentino en base a aceite de soja se ubicarán en un rango de entre 71,45 por ciento y un 72,28 por ciento.
Agencias internacionales recordaron que en agosto el Departamento había fijado aranceles preliminares para compensar los subsidios de un 50,29 por ciento a un 64,17 por ciento para el biodiésel de Argentina.
“Apreciamos que se esté trabajando sobre estos subsidios injustos, así podemos resolver este obstáculo particular para el crecimiento sostenido de la industria doméstica”, afirmó el jefe de operaciones de la NBB, Doug Whitehead, en un comunicado.
El 90 por ciento de las exportaciones de biodiésel argentino tenía como destino el mercado estadounidense en operaciones por entre 1.100 y 1.200 millones de dólares anuales, que los productores esperaban llevar este año a los 1.500 millones.
Argentina rechaza otra acusación de las empresas estadounidenses de que su biodiésel se vende a precios demasiado bajos y que eso motiva las tasas antidumping.